Calahorra, guía arqueológica

8 de diciembre de 2020

POSIBLE CAMPAMENTO ROMANO EN CIRAUQUI

Tramo de muro y escarpe oeste

En este post quiero dar noticia de la identificación de un campamento romano o un castro de la Edad del Hierro en las cercanías de Cirauqui.

El 2 de diciembre de 2020 me dirigía a visitar el castro de Urbe, castro descubierto y dado a conocer por Javier Armendáriz Martija y que se encuentra también en el municipio de Cirauqui. De camino al castro tuve la suerte de encontrarme con Daniel Ortigosa Araiz, vecino de la localidad. Le comenté a donde iba y, dado que la conversación versaba sobre arqueología, me señaló una zona en dirección al río Salado, que, según me dijo, era conocida como Txurikoba. Me comentó que allí habían aparecido restos arqueológicos romanos, y que, por lo visto, aunque no se habían realizado excavaciones, se pensaba que allí había existido una villa romana.

Interesado por el tema cambié mi ruta y me dirigí hacia el espolón de terraza conocido como Txurikoba. Daniel tuvo la amabilidad de acompañarme. Ya desde lejos me llamaron la atención los terraplenes que se veían en el flanco oeste.

Una vez en el lugar vi que este era un lugar situado estratégicamente. El espolón de terraza estaba protegido de manera natural por dos barrancos al este y al oeste, y un fuerte escarpe en el flanco sur. Además, dominaba perfectamente el corredor de comunicación natural del río Salado.

Procedimos a recorrer Txurikoba, tanto por su perímetro como por su interior. Empecé a ver majanos con muchos sillares de piedra en la zona norte, el lugar por donde el enclave era más accesible. Si este lugar fue un campamento militar o un castro, esta zona debió estar protegida por una muralla. Pensé, por tanto, que los sillares que se acumulaban en los majanos podían proceder del desmonte de la muralla por las labores agrícolas modernas. 

Uno de las acumulaciones de piedra en el sector noroccidental del yacimiento

También pudimos ver un gran muro de piedra de decenas de metros de longitud. Estaba ubicado también en la zona norte de Txurikoba. Pudo ser parte de la muralla norte. Por otra parte, no me extrañaría que la defensa del enclave se completara con una atalaya de vigilancia en el cerro donde hoy está Cirauqui.

Muro norte

Es de suponer que también pudo existir un foso junto a la muralla para mejorar la defensa. Pero de haber existido, no queda rastro del mismo. Puede ser que su desaparición se deba a su colmatación por el acondicionamiento del terreno para la explotación agrícola.

Rodeando el lugar pude ver más restos de muros y sillares en los flancos este y oeste. La gran abundancia de sillares y muros de piedra son difíciles de explicar por la mera actividad agrícola moderna. 

Restos de un muro asomando en el terraplén

Al principio pensé que el lugar podía ser un castro de la Edad del Hierro no catalogado. Pero, contrastando lo que veía sobre el terreno con la información de la cartografía, me di cuenta del evidente parecido con el campamento romano de los Cascajos, en Sangüesa. El campamento romano de los Cascajos fue descubierto por Juan Cruz Labeaga y dado a conocer en la Carta Arqueológica del término municipal de Sangüesa. Posteriormente fue estudiado por Javier Armendáriz, que abogó por la posibilidad de que fuera un castro, si bien las últimas excavaciones parecen confirmar que, efectivamente, fue un campamento romano, sin excluir la posibilidad que se instalara sobre un castro, a modo de lo que pudo pasar con Pompelo, la actual Pamplona.  

Estas son las similitudes entre el campamento romano de los Cascajos y Txurikoba:

1º Planta de tendencia rectangular:

- Los Cascajos: 300 x 240 m aproximadamente.

- Txurikoba: 300 x 270 m aproximadamente.

2º Igual ubicación estratégica sobre la amplia vega de un río, controlando el paso natural del corredor de comunicación que forma el río:

- Los Cascajos: Distancia al río Aragón = 800 m aproximadamente. Elevación de la terraza sobre la vega del río = 30 m aproximadamente. Altura sobre el nivel del mar: 436 m.

- Txurikoba: Distancia al río Salado = 700 m aproximadamente. Elevación de la terraza sobre la vega del río = 30 m aproximadamente. Altura sobre el nivel del mar: 407 m.

3º En los dos enclaves han aparecido restos arqueológicos romanos.

4º El interior de los dos yacimientos son planicies, terreno llano muy apto para la ubicación de casas, tiendas o cabañas.



Por otra parte, una calzada sube desde la vega del río Salado hasta lo alto del espolón de terraza y atraviesa el lugar de sur a norte. Es muy similar a la conocida calzada de Cirauqui. La calzada de Txurikoba puede ser una continuación o un ramal de la calzada que se encuentra en el pueblo. La calzada que pasa por Cirauqui, aunque se la denomina romana, está muy modificada en tiempos medievales. Pero ya debió existir en tiempos romanos e incluso anteriores. 

La continuación de la calzada pasa junto al castro de San Cristóbal, castro cercano a Guirguillano. Seguía hacia Salinas de Oro e Ibero para entrar en la Cuenca de Pamplona. Seguramente esta vía fue utilizada como cañada para el ganado también desde tiempos protohistóricos.

Calzada de Txurikoba

La calzada pasa por el medio de Txurikoba. Esto me recordó la manera en que se estructuraban los campamentos del ejército romano. Se establecían las dos calles principales, el cardo y el decumano, que se cruzaban perpendicularmente en el centro del campamento. A partir de estas calles se creaban las demás calles de forma ortogonal, haciendo una cuadrícula. Este modelo también se aplicaba en las ciudades romanas de nueva planta.

Calzada de Txurikoba

La calzada que atraviesa Txurikoba era el cardo del campamento. Al atravesar el campamento facilitaba, además, la salida de las tropas que estuvieran acuarteladas en el mismo, tanto en dirección norte, hacia Pompelo, como en dirección sur, para tomar el corredor del río Salado hacia Andelos.

¿Y el decumano? Un camino sale perpendicularmente de la calzada en el centro de la superficie del enclave. Esta pista puede estar superpuesta al antiguo decumano del campamento. Sólo se conservaría la parte occidental del mismo, ya que la parte oriental del decumano habría quedado bajo el campo cultivado.


Lógicamente, esto que planteo es solamente una hipótesis para futuros trabajos arqueológicos. Lo aquí dicho, solamente podría ser ratificado en el caso de hacer excavaciones arqueológicas sobre el terreno, tal como se ha hecho en el campamento romano de los Cascajos, en Sangüesa.

También cabe la posibilidad que Txurikoba fuera un gran castro u oppidum que controlara el corredor del río Salado antes de la llegada de los romanos. Podría ser la traslación a un enclave de mayores dimensiones de la población del cercano castro de Gazteluzar, castro de la Edad del Hierro ubicado a tan solo 2 kilómetros aguas abajo del río Salado, también sobre la vega del río.

No obstante, yo me inclino más hacia la hipótesis del campamento romano, por su forma de tendencia cuadrangular, la calzada que lo atraviesa de norte a sur a modo de cardo y el material romano que se encontró en el lugar. Además, su ubicación, a unos 7,8 kilómetros en línea recta de Andelos, una de las ciudades romanas de mayor importancia en la zona de Navarra, permitiría la defensa rápida de la ciudad en caso de ser atacada, evitando la incomodidad de acuartelar a soldados dentro de la misma.

También es posible que el campamento fuera anterior a Andelos, y que correspondiera a los primeros momentos de ocupación por Roma del territorio que hoy es Navarra. Otra opción es que fuera construido en el contexto de las guerras sertorianas en el siglo I.a.C.

En resumen, creo factibles las siguientes posibilidades en relación al lugar de Txurikoba:

1.- Campamento romano de nueva creación y con vocación de permanencia, lo cual explicaría la construcción en piedra.

2.- Campamento romano creado sobre un antiguo castro u oppidum prerromano, reutilizando las estructuras defensivas del mismo.

3.- Gran castro u oppidum prerromano.

Si se ratificara cualquiera de estas posibilidades, Cirauqui completaría sus atractivos arqueológicos con otro hito patrimonial de importancia que se sumaría a su conocida calzada y puente romano. Un hito de 2.000 años de antigüedad que se remonta a la romanización de Navarra.

Muro con sillares reaprovechados junto a la calzada

En el siguiente enlace te dejo el track de la ruta que hice a Txurikoba. En los waypoints marco los lugares que detallo en este artículo y que me parecieron los más interesantes.

- Ruta al posible campamento romano de Cirauqui.

Por último, quiero dar las gracias a Daniel Ortigosa Araiz por ponerme sobre la pista de este lugar y luego acompañarme amablemente en la prospección que realicé. Da gusto encontrarse con gente tan amable e interesada por el pasado es su tierra.

También quiero animar a quien lea esto y tenga alguna información adicional sobre el lugar, a que la deje en los comentarios. Seguro que será de gran utilidad y servirá para avanzar en esta hipótesis sobre la existencia en Txurikoba de un campamento romano o castro.

Bibliografía:

Juan Cruz Labeaga Mendiola. Carta arqueológica del término municipal de Sangüesa (Navarra). Trabajos de arqueología Navarra, nº 6, 1987, págs. 7-186.

Javier Nuin Cabello, María Rosario Mateo Pérez, Alexandre Duró Cazorla. Noticia del hallazgo de la Calzada del Arga. Trabajos de arqueología Navarra, nº 28, 2016, págs.289-297.

Javier Armendáriz Martija: De aldeas a ciudades. El poblamiento durante el primer milenio a.C. en Navarra. Gobierno de Navarra, Departamento de Cultura y Turismo, Institución Príncipe de Viana, 2008. Trabajos de arqueología navarra. Monografías arqueológicas; 2.

Amparo Castiella. Sobre la red viaria romana en Navarra. Cuadernos de arqueología de la Universidad de Navarra, nº 8, 2000, págs. 181-196.

Amparo Castiella. Por los caminos romanos de Navarra. Fundación Caja Navarra, 2003.

Julio Asunción. Pueblos Guerreros de Navarra. Guía arqueológica de los castros vascones, celtíberos y berones de la Edad del Hierro. 2019