Ver YACIMIENTOS DE BIGUEZAL en un mapa más grande
Tipo de ruta: Ida y vuelta.
Distancia: 10,260 Km.
Desnivel máximo: 465 metros.
Desnivel acumulado: 553 metros.
Ruta de muchos atractivos para el caminante. Partiendo desde el pueblo de Bigüezal, en el este de Navarra, ascenderemos a las cimas de San Kiriko e Illón. En el camino visitaremos uno de los mejores dólmenes que podemos ver en Navarra, el dolmen de Faulo. Prehistoria, ermitas y panorámicas extensas hacen esta ruta sumamente recomendable. La ruta, de algo más de 10 kilómetros de recorrido, puede completarse visitando otros dólmenes de la zona (ver en mi blog).
(Km. 0,00) La caminata comienza en la plaza que se encuentra en la misma entrada del pueblo de Bigüezal. Atravesamos el pueblo en busca de la iglesia, que dejamos a la izquierda y continuamos hasta la ermita de Santa Quiteria, que también es el cementerio del lugar.
(Km. 0,375) La ermita se encuentra en la salida del pueblo, hacia el este. Cogemos la pista que desde aquí se dirige hacia la sierra. Desde aquí vemos la cima de la sierra de Illón, punto más alto de esta ruta.
(Km. 0,600) Bifurcación. Tenemos que seguir a la izquierda. Un rústico poste indicativo nos señala la dirección a San Kiriko.
(Km. 0,880) A la izquierda de la pista vemos un hito de piedras. Es un atajo que va a ahorrar unos metros de camino acortando la curva que delante de nosotros hace la pista.
(Km. 1,040) Acaba el atajo entre los bojes y volvemos a la pista. En ascenso vamos ganando en panorámicas sobre el valle y la sierra de Leire, que vamos dejando a la espalda. Bigüezal, se extiende abajo, con su caserío distribuido en forma de almendra.
(Km. 1,700) Más adelante, a la derecha, poco antes de que la pista haga una curva cerrada a la izquierda, un hito informativo puesto por el Gobierno de Navarra nos señala el dolmen, que se encuentra a una decena de metros.
El dolmen de Faulo es uno de los más espectaculares de Navarra. De los casi dos centenares que llevo visitados hasta el momento (noviembre 2.010), este está entre los 10 mejores. Rodeado por un túmulo de piedras de 15 metros de diámetro, conserva su estructura primigenia, con la cámara compuesta de grandes megalitos. La losa superior, aunque deslizada sobre sus soportes, todavía aguanta en su sitio. Esta cubierta, que es la piedra más grande del dolmen, tiene aspecto cuadrangular, de dos por dos metros y 30 cm. de grosor. Un hermoso roble cercano y unas panorámicas bellísimas desde el monumento prehistórico, hacen de este lugar un sitio muy especial. Arriba, visible también desde aquí, espera la ermita de San Kiriko, siguiente objetivo de la ruta.
(Km. 2,500) A partir del dolmen la pista inicia una ligera bajada. Al llegar a un bosquete de pinos encontramos una bifurcación. Aquí seguimos a la izquierda.
(Km. 2,620) A poco más de un centenar de metros encontramos otro cruce. Seguimos por la izquierda.
(Km. 3,400) Seguimos el sendero. El ascenso finaliza en la ermita de San Kiriko. Parece ser que las ermitas dedicadas a esta advocación tan curiosa vienen de la cristianización de lugares sagrados paganos.
Desde el cortado rocoso donde se encuentra la ermita se disfrutan grandes vistas. Veremos la sierra de Leire, que acaba hacia el oeste en la llanada de Lumbier. También hacia occidente se divisa la cicatriz que crea en la tierra la Foz de Lumbier, espacio natural protegido. Es un profundo cañon, el más impresionante de Navarra, de 6 km. de longitud y casi 400 metros de profundidad, creado a lo largo de milenios por el río Salazar. Hacia el este se ven algunas sierras aragonesas y, si continuamos la valla que protege de caídas que se encuentra junto a la ermita, llegaremos a ver el Ori, hacia el norte.
En la pared oeste de la ermita hay una fuente, y en la trasera, un chamizo que ocasionalmente puede valer de refugio para hacer vivac.
Para ascender a lo alto de la sierra de Illón, en vez de volver por el mismo camino, vamos a seguir un sendero que recorre el cordal de San Kiriko. A sólo 60 metros de la ermita, junto al sendero, encontramos el buzón montañero que marca el punto más alto de esta cima, que, como la de Illón, está considerada de primera categoría en Navarra.
(Km. 3,840) El sendero se sigue fácilmente en su inicio. A los 400 metros desde la ermita hay una bifurcación de senderos. Aquí hay que dejar el más pisado, y coger el de la derecha, el que sigue más fielmente el cordal.
El camino se desdibuja en algunos momentos, pero nosotros sólo debemos seguir el cordal al tiempo que atravesamos un hermoso bosque de pino silvestre.
Tras pasar junto a un palomera, damos con otra pista.
(Km. 4,550) Siguiendo esta nueva pista llegamos a un claro en cuyo centro hay una piedra de un metro de longitud. Aquí dejamos la pista y cogemos otra un tanto desdibujada que sale a la izquierda.
(Km. 4,700) Atravesamos otro pequeño pinar y enlazamos con otra pista mejor conservada. Vamos a la izquierda, en ascenso. Poco más adelante la pista se convierte en el sendero que nos va a llevar a la cima de la sierra de Illón. Pasamos algunos claros con bojes, pinos y enebros.
(Km. 5,950) En este punto hay que tener cuidado. Pocos metros después de dejar a la derecha un gran pino que crece junto al sendero hay que salirse por la derecha para afrontar los últimos metros de ascenso a la cima. La desviación está indicada por un hito de piedras con marca amarilla.
(Km. 6,020) Poco más adelante se abre una estupenda panorámica de los Pirineos, con el Bisaurín (2.600 m.) como protagonista. Desde aquí se ven mejor que desde la misma cumbre, ya que arriba los árboles tapan la vista hacia esta zona.
(Km. 6,150) Cumbre de Illón (1.283 m.). Un bonito buzón con forma de txistu y tamboril la marca. Desde aquí la panorámica se abre hacia el sur y el este. Debajo de nosotros los caminos por los que hemos transitado para llegar hasta aquí, con el pueblo de Bigüezal a la derecha. Arangoiti, con su repetidor coronando la cima de la sierra de Leire, hacia el sur. También vemos Lumbier que se extiende en la llanada, hacia el este. Como curiosidad hay que señalar que ante nosotros se abre un paisaje que ha dado muestras de la más antigua ocupación de Navarra. Del Paleolítico, en la zona de Lumbier se encontraron algunos bifaces (hachas de piedra). Cerca, en la ladera de la sierra de Illón está además el abrigo del Padre Areso, que fue ocupado al menos desde el Epipaleolítico, periodo de transición entre el Paleolítico y el Neolítico (ver ruta a este abrigo en este blog).
(Km. 7,550) Volvemos al pueblo por el mismo camino, pero en vez de regresar a San Kiriko, en el cruce de pistas, a 1,4 Km. de la cima, seguimos por la de la izquierda. Esta pista es la misma que hemos usado para ascender a la ermita. Sólo queda ahora desandar el camino, mientras disfrutamos las vistas en el descenso.
(Km. 10,260) Llegamos a Bigüezal, con su ermita-cementerio y su iglesia. Si aun tenemos fuerzas y ganas de conocer otros restos de la prehistoria de estas tierras, nos podemos acercar al abrigo del Padre Areso o a los dólmenes de Puzalo y La Pieza de Luis, rutas detalladas también en este blog.
TRACK Y WAYPOINTS DE LA RUTA.
Si has visitado esta página es que te gusta la arqueología. Prueba a visitar mi blog de rutas arqueológicas en Alicante:
http://arqueologiaalicante.blogspot.com
Otras rutas por Navarra en:
http://senderismonavarra.blogspot.com
http://senderosderoncesvalles.blogspot.com